1.
CALIDAD DE CONSTRUCCIÓN, POSVENTA Y PRESENTACIÓN Notable. A diferencia de la serie UM -donde la apariencia de las carcasas y, sobre todo, ver goterones de pegamento minan tu confianza- los Westone W30 parecen un producto razonablemente robusto. Las carcasas tienen buen apariencia y textura, y parecen capaces de resistir los embates del día a día. No llegamos al nivel de acabados de Shure, empero. La mejora respecto de las carcasas y ensamblaje de la serie UM, me hace pensar que Made by a machine in China es, en 2016, más garantía de calidad que Made by hand in the USA
Si la realidad del día a día desmintiera la pinta de estar hechos para durar, podemos estar tranquilos (e incluso poner champán a enfriar). El posventa de Westone va más allá de la diligencia profesional, y puede llegar a emocionar. No diré que deseo que se rompan pronto mis W30, pero sé que si eso sucede todo irá bien y no estaré desamparado ni sujeto a tarifas alocadas. En Colorado miman mucho al cliente, más que en París (Miro a Franck, de Earsonics; paradigma de lo contrario: cuando se rompen tus Earsonics éste franchute te criminaliza en vez de mimarte, aunque estés en garantía).
En lo concierniente a la presentación, la nota es matrícula de honor, mejor aún que la de los UM Pro 50, dado que incluir cable Epic y cable Made For iPhone es un detallazo, e incluir carillas de varios colores, remata una faena ya de por sí muy lograda. Una vez más, este tipo de presentación anima a usar el producto y a observarlo con mucho orgullo y confianza. Parece un trabajo muy serio y profesional y bien dimensionado (En contraposición a lo exagerado de la presentación de los SE846, cuyo caja es innecesariamente grande, y menos elegante que esta de Westone).
2.
COMODIDADMatrícula de honor. Son tan cómodos como unos iem de un solo driver. Y extremadamente ligeros. En el bullseye, de nuevo. Muy fáciles de poner, y usables horas y horas como si no llevaras nada. Tu cerebro dirá basta antes que tus pabellones auditivos.
3.
AISLAMIENTOSobresaliente. Con las Westone True Fit el aislamiento es enorme. Sólo los SE846 aislan un pelo más (No creo que ni un custom aisle más que los SE846).
4.
SONIDOSobresaliente: 8.5 4.1 Balance tonal: diría que su tono es el de unos Shure SE535 invertido; esto es, en vez de una leve A, es una leve V. Entran holgadamente dentro de lo que yo entiendo como un sonido equilibrado, donde ninguna frecuencia queda ninguneada o perdida allá en Dios. Su tono funciona muy bien tanto con Diana Krall, como con Chemical Brothers, Kanye West o AC/DC. Minipunto importante para los W30: polivalencia tonal.
4.2 Subgraves-Graves: ideal relación entre subwoofer y graves, absolutamente lineal. Y cuando la relación subgrave-grave es perfectamente lineal se puede uno permitir la licencia de dotar de mucho peso al sonido sin deflagrar, en lo más mínimo, la claridad de los medios. Esta linearidad es la clave del sonido conjunto que sacan estos W30. Los subgraves tienen profundidad, peso, velocidad e impacto (aunque no llegan al nivel de los SE846 o los Pro 50). Los graves tienen buena presencia y textura y son cero intrusivos en los medios. Por otro lado, esta linearidad es un departure para Westone, que hasta estos W30 siempre había enfatizado el midbass. ¿Signo de lo que vendrá?
4.3 Medios: los W30 presentan unos medios un poco más atrasados que unos Shure SE535 o Westone UM Pro 30; las voces no están tan cerca de ti como en los antedichos iems. Lo cual no es óbice para que la claridad, la riqueza y los matices no brillen con luz propia. Gracias a la linearidad de los graves y a las vías separadas podemos disfrutar de unos medios muy buenos, que no nos harán acordarnos de otros auriculares más midcéntricos. Diana Krall y Sinatra suenan de muerte, y los folkies también. Los W30 confieren a los medios un espacio tan propio -y están tan libres de intrusiones bajistas- que no puedo evitar calificarlos como muy buenos.
4.4 Agudos: muy buenos. Energía controlada en los agudos bajos, para evitar fatiga y sibilancias (que no existen en este auricular), y mucha chispa en los agudos altos, con mucha extensión y muy buen detalle. Están muy conseguidos porque no se hacen cansinos a volúmenes altos, y confieren mucha vitalidad a las escuchas a volúmenes bajos. De nuevo, como con en el tono, hay polivalencia a efectos presión sonora: suenan muy bien todos los volúmenes.
4.5 Imaging/Soundstage: aquí los W30 batean la bola fuera del estadio. La escena de los W30 es como la de la Sala 25 de los cines Kinépolis de Ciudad de la Imagen: gigante (para un iem). Anchura, profundidad, altura, espacio a raudales y una sensacional separación de instrumentos logran que incluso supere a los Shure SE846. El sonido más abierto y expansivo que he oído en un iem (Claro que tampoco he oído muchos

5.
CONDUCIBILIDADMatrícula de honor( cum laude)
5.1 Volumen: los W30 dan bastante volumen, menos que los SE535 y los Pro 50, pero más que suficiente. Hasta con Xperias Z y discos con poco volumen intrínseco pueden sonar muy alto y con cero distorsión. Son, en suma, muy aptos para la fuentes capadas que nos suelen endiñar en la Unión Europea.
5.2 Linearidad: con una impedancia altísima para un iem (entre 40 y 110 ohmios en la parte más audible del ancho de banda) la impedancia de salida de la fuente les resulta indiferente, y no habrá alteraciones tonales importantes aunque el amplificador tenga unos cuantos ohmios de impedancia de salida. Si todos los Westone suenan bien con todo,estos son el top dentro del top.
5.3 Impedancia mínima: más de 20 ohmios en los agudos altos, y, como dije entre 40 y 110 en el resto del espectro. Esto comporta que no tendremos hiss por castigo, aunque la fuente no sea ultrasilenciosa, y que casi toda fuente sacará voltaje suficiente para que la señal eléctrica que llega al transductor tenga baja distorsión y buena separación de canales. Son unos iems ideales para usar con smartphones.
6.
CONCLUSIÓNSobresaliente. Un producto redondo; muy completo tanto en diseño, como en construcción, presentación y sonido; el cual irradia una agradable sensación de plenitud porque lo hace todo muy bien, con mucha solvencia.
Siendo unos auriculares con un sonido muy bueno, que se mueven con la gorra, que son muy cómodos y qeu aislan un montón, son todo lo que un iem tiene que ser...menos baratos (No se puede tener todo). Calidad precio los veo cerca del spot-on. A partir de aquí la maza de los rendimientos decrecientes golpea con fuerza.
Leí que el director de diseño de Westone, Karl Cartwright, se había implidado muy directamente en el desarrollo de este producto (al sentirse vituperado por las reviews de los Westone 3), y, ciertamente, el resultado es sorprendentemente bueno. No en vano, este Cartwright, junto con Jerry Harvey, montó el chiringuito de los iems allá por los 90. Incluso fue el padre de los primeros iems que lanzó Shure.
Equipo usado para mover los W30:
iPhone 6 128gb modelo A1586 GSM-CDMA (Japón) -> no sometido al doble capado de los iPhones europeos
iPod Classic 7G + LOD + iBasso T3

