Buenas:
Llevo mucho sin prestar verdadera atención a los medios, pero me he cruzado un comentario sobre la cercanía del bicentenario del nacimiento de Chopin.
Sin entrar en rollos, que todos tenemos google, decir que es un compositor a tener en cuenta. Su dedicación al instrumento le resta importancia, pero su aportación al mundo pianístico es indudable.
En mi humilde opinión de oyente, conjuga muy bien el melodismo romántico con un lenguaje que se acerca a veces al impresionismo. En su época, se entendía más a Liszt, y creo que, poco a poco, se hace justicia y se han ido igualando. Para mi, el músculo de Liszt en esas obras tan ambiciosas, me dejan algo frío.
En cuanto a su obra, no muy extensa, es un fiel reflejo de la búsqueda de formas nuevas y ampliación de las existentes. Los nombres son variados: mazurca, polonesa, vals, impromptu, preludio, nocturno, balada, scherzo, estudio, fantasía... pero el fondo es el mismo y la diferencia es difusa.
De todos ellos yo destacaría los estudios, por lo que supuso de novedad en el estudio del instrumento. Antes meros ejercicios, ahora, verdaderas piezas de concierto. Puedes aprender con obras de entidad. Ambos cuadernos, el op 10 y op25 son admirables. El primero finaliza con el maravilloso y conocido "Revolucionario".
Por melodía me gustan los preludios y los valses. Por equilibrio, las baladas.
En fin. Que siempre es un buen día para escuchar música, y siempre es un buen día para escuchar a Chopin.
PS: Me he agenciado algún disco de oferta en el Corte británico. Recomiendo.
Un saludo